martes, 21 de mayo de 2013

La educación del siglo XXI

Estamos viviendo un cambio de época donde todos los paradigmas que habían soportado las bases de la sociedad como las de la economía, la política, la educación, la tecnología, etc. están siendo revaluadas y reinventadas para dar respuesta al hombre de hoy y a sus necesidades cada vez más cambiantes. 

El ser humano cada vez tiene la necesidad de estar en contacto con la sociedad, la educación y las posibilidades de acceso a los medios tecnológicos que le posibilitan la interacción con los demás y con el conocimiento. 

Hoy dentro de este marco la escuela cumple un papel fundamental en la relación hombre sociedad y de la visión que tenga este de su realidad; de su aporte en la construcción de un mundo más acondicionado a sus necesidades y en busca del desarrollo y el bien común. “Los cambios educativos que guardan relación con la profundización del conocimiento pueden ser probablemente los mayores y tener más impacto en el aprendizaje.”[1] La escuela es un agente activo en la construcción de imaginarios y de identidad, no se puede entender a una organización social sin la escuela. 

Por eso el papel del docente es de gran importancia, ya no como un mero instrumento de transmisión del conocimiento, sino como un agente motivador de la investigación y guía en el proceso de aprendizaje, tiene una visión global del campo de su asignatura, rompe con los límites tradicionales para llevar el conocimiento al contexto de la realidad del estudiante para hacer de conocimiento algo útil y de beneficio para todos. 

Dentro de este marco la formación en tecnología se hace cada vez más necesaria y pertinente, porque se exige no solo desde la formación tradicional que los alumnos posean unas competencias en el área de informática y tecnología para poder enfrentarse a un ordenador, como erróneamente muchas veces se ha entendido, sino el asumir “La tecnología, como actividad humana, se centra en el conocimiento mediante el uso racional, organizado, planificado y creativo de recursos”[2] Esta visión ubica al docente en un papel de orientador no solo en técnica sino en la del manejo y transformación de los recursos de su entorno. 

El docente también tiene que estar preparado para los cambios y la adaptación de nuevos retos y posibilidades a las problemáticas que cada vez aparecen en la realidad social del hombre, un docente que se mantiene informado y hace de su conocimiento un puente entre en alumno, el saber, el que hacer y el mundo. La tecnología hoy no pasa desapercibida por la escuela o los espacios de formación, esta cada más inmersa en la sociedad de lo que pensamos, por eso los docentes cada día deben de incorporar las TIC a sus desarrollos pedagógicos, vemos como los alumnos tienen más incorporados los avances tecnológicos a sus vidas que la misma escuela a sus programas educativos. 

Esta realidad ya plantea un desafío para la escuela y el docente. Porque la adaptación y la aplicación de la tecnología en la vida de la sociedad cada vez es más rápida y llega a más sectores sociales, se hace más democrática en este contexto el docente tiene que ser un motivador de la creatividad para buscar respuestas a las necesidades que nacen en esta nueva sociedad y de ser guía y acompañante de la formación técnica y del buen uso de la tecnología en medio de un mundo que vemos que muchas veces se deja orientar por el afán de poder. 

El docente del área de sistemas y tecnología debe ser un docente comprometido con la sociedad, motivador de las competencias de la creatividad, la transformación de los objetos y de la aplicabilidad de la técnica en la realidad para el bienestar de todos los seres humanos y de la naturaleza.




[1] Estándares de competencia en TIC para docentes, Organización para las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (2008) Pag 9
[2] Estándares básicos de competencias en tecnología e informática, Ministerio de Educación Nacional. (2006).  Pag. 4

No hay comentarios: